
Su deceso se produjo tras varios años de padecer de serios problemas de salud.
Madre de cuatro, enviudó a sus 35 años y desde entonces se dedicó en cuerpo y alma a su cuidado, según explicó su hermano, quien la describió como una gran mujer, un ser maravilloso, noble y repleta de amor.
Lo dio todo por sus hijos Sonia Angelina. Lissette, Pedro y Osvaldo Mauricio, así como por sus nietos y hermanos, por lo que a decir de estrellas, sus proles deben sentirse orgullosos de haber tenido una madre de esas cualidades humanas, de haber sido procreados por un ser humano sublime, intachable e inmaculada.
“Cuando nací tenía 15 años, por lo que fue una segunda madre para mí, el apodo con el que me conocen los familiares y amigos de infancia, ella fue quien me lo puso. Solo recuerdo de ella mucho amor, cariño, protección y apoyo”.Que te vayas en paz mi hermana del alma, porque en esta tierra dejarás un legado de nobleza y amor, que será el ejemplo con el cual siempre te veremos y que irradiara a todo el que te conoció”, escribió Estrella en dedicatoria a su partida. Que descanses en paz.
Fuente: CostaverdeDR.com